El salario es la remuneración en efectivo fijada por acuerdo o por ley, que un empleador debe pagar a un trabajador por el labor realizado o por los servicios prestados, según un contrato de trabajo.
El salario mínimo es el necesario para asegurar al trabajador un nivel de vida adecuado, satisfaciendo sus necesidades físicas, intelectuales y morales, de acuerdo con las condiciones económicas locales.
En algunas industrias u ocupaciones, el salario puede incluir prestaciones en especie. En estos casos, se debe garantizar que estas prestaciones sean apropiadas para el uso personal del trabajador y su familia, y que su valor sea justo y razonable.
El salario se puede fijar:
- Por tiempo trabajado: mensual, diario o por hora.
- Por producción realizada: comisión, destajo, a la parte por incentivo, asegurándose, como mínimo, el logro de un salario normal, por 8 horas de trabajo.
- Por sistema mixto: un salario básico por tiempo, y después de alcanzar un mínimo de producción se establece un porcentaje por comisión o producción.
Plazos:
La ley garantiza el derecho a una remuneración justa para todos los trabajadores y empleados que estén prestando servicio.
- Si el pago es mensual: dentro de los cinco primeros días hábiles y nunca después de los diez primeros días corridos del mes siguiente al que corresponda abonar.
- Si el pago es quincenal: dentro de los cinco días hábiles al vencimiento de la quincena que deba abonarse.
- Si el pago es semanal: al finalizar la respectiva semana.
Los días feriados, domingos y sábados (cuando la empresa normalmente no trabaje) son considerados inhábiles, aunque se trabaje en ellos durante ciertas temporadas. Los demás días se consideran hábiles.
El salario se considera pagado cuando está disponible para el trabajador.
La norma que establece los plazos para el pago del salario es el Decreto Ley 14.159, de fecha 21 de febrero de 1974, en la redacción dada por el artículo 719 de la Ley 16.170.
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